Se cierra la etapa del máster en Comunicación y Educación en Red: De la sociedad de la información a la sociedad de la comunicación en la especialidad de Comunicación Digital
Ayer, concluí mis estudios del máster en Comunicación y Educación en Red: De la sociedad de la información a la sociedad de la comunicación en la especialidad de Comunicación Digital. La aventura comenzó a finales de 2012 cuando tras la finalización del máster en Redes Sociales y Aprendizaje Digital decidí apostar por continuar los estudios accediendo al máster oficial.
Ha sido año y medio de duro trabajo. Dicen que estudiar por la UNED es fácil, te puedo asegurar que no. El nivel de exigencia es tremendamente alto y hay que ser muy disciplinado y constante para poder sacar todo a la primera. Todo es más fácil cuando en el camino te encuentras a gente maravillosa como Isa, Laura, Elena, Alicia, Noela, Vero, Ana, Mireia, Ana, Juanjo y Clothi que, a pesar de la distancia, se sienten cerca, muy cerca y hacen que el trabajo y los estudios sean mucho más llevaderos gracias a sus palabras de ánimo, a los hangouts y a su excelente capacidad de trabajar en equipo. Sin vosotros, no hubiera conseguido sacar la mitad de trabajo. ¡Gracias infinitas!
Tras superar las asignaturas tanto troncales como de especialidad, en mi caso, la elegida fue Comunicación Digital, tocaba ponerse con el TFM (Trabajo Final de Máster) muchas dudas por delante, me encontraba muy desubicada pero gracias a Carlos me encontré y con su ayuda decidimos analizar y poner en práctica todo lo que estaba aprendiendo y descubriendo sobre los MOOCs gracias a mi trabajo en CSEV como soporte técnico de diferentes plataformas. Conociendo todos los procesos de un MOOC, desde la creación hasta la producción final así como el desarrollo del curso en UNED COMA tenía en mi mano todo el conocimiento de los cursos, sabía por qué unos funcionaban, por qué otros no, cuál era el mejor formato para asegurar cierto éxito con este tipo de metodología. Así que me puse manos a la obra. 9 meses y 164 páginas tenía concluido mi TFM titulado «Análisis y pautas para el desarrollo de un MOOC: Estudio de caso en UNED COMA: Alemán para hispanohablantes: Nociones fundamentales
Por delante un mes para preparar la exposición y la defensa del trabajo en el que había puesto lo mejor de mí. Un mes que se ha hecho largo y una última semana que se ha hecho eterna, horas y horas de darle vueltas a la cabeza a la dichosa presentación, qué poner, qué quitar, dónde incidir más, qué es más importante. Me jugaba estos 9 meses en 20-25 minutos y ayer, 24 de julio de 2014, llegaba el día. El día de la presentación, el último día, el día.
Un tribunal en el que estaba mi directora, Sagrario Rubido junto a Tiberio Feliz y a Sonia Santoveña. Los 3 metidos de lleno en un proyecto europeo sobre MOOCs, que han denominado ECOproject. Comenzaba la presentación y fruto de los nervios la hice demasiado deprisa. Con lo bien que salen en casa estas cosas, ¿verdad? Terminé la exposición y Sonia rauda y veloz me acercó una botella de agua y una copa porque tenía la boca complemente seca. Los 3 me dieron la enhorabuena por el trabajo hecho, me dieron sugerencias y me hicieron alguna puntualización pero comentaron que era un trabajo muy bueno, que era una temática que dominaba y que se me veía entusiasmada defendiendo el proyecto. En el tiempo de debate más que preguntas hubo, especialmente por parte de Tiberio, recomendaciones para seguir y mejorar la investigación.
Tras el tiempo de deliberación, me comentaron la nota. Un 9, máxima nota del tribunal. Todos me dijeron que el proyecto estaba muy bien. El trabajo de tantos meses ha dado sus frutos. No puedo estar más contenta.
Dar las gracias a los miembros del tribunal por haber alabado tanto mi proyecto, es emocionante recibir tantos halagos.
Y gracias, gracias a todos los que me habéis acompañado durante estos meses de investigación, sin vuestro apoyo constante ésto no hubiera salida ni la mitad de bien.