Esa fue mi reacción al leer la tarea que teníamos que hacer esta semana para la asignatura de Principios de la Comunicación Digital. Se trataba de hacer un mapa mental siguiendo las ideas que se propusieron durante la #dialécticaTwitter que mantuvimos el pasado jueves.
Gracias a tweetdeck, creé una columna con el hashtag #dialécticatwitter y por ahí seguí toda la conversación, era un poco complicado, porque había mucha interacción, pero creo que no se dio mal, eso sí, al día siguiente twitter me bloqueó el envío de MD durante todo el día, supongo que con tanto tweet la aplicación pensó que era spam.
Al seguir la conversación por la columna de tweetdeck, tenía almacenada toda la información, pero para hacer más fácil el posterior mapa mental, decidí copiarla a un word y de ahí publicar un pdf para la elaboración del mapa.
Existen numerosos programas para hacer mapas mentales, uno de ellos mindomo, el cual ha sido utilizado por Isa para crear su propio mapa mental. Creo que es bastante utilizado como recurso educativo, aunque pueda ser que me equivoque, pero al no ejercer no los controlo. Por lo tanto y gracias a San Google me bajé el programa Personal Brain.
¿Cómo funciona? Se crea el pensamiento de inicio o cerebro y desde allí se van creando padres (a mismo nivel que el cerebro) o hijos, también se pueden incluir saltos. Dentro de cada concepto se pueden añadir enlaces no sólo a páginas webs, sino a documentos de word, a imágenes…
El mayor problema radica a la hora de exportarlo, sólo permite hacerlo en html o xml (para ponerlos en webs), pero existe la posibilidad de sincronizarlo con la página web y de ahí publicarlo a la red.
Una vez subido a la web, puedes personalizarlo al gusto, añadir una imagen de presentación, una descripción categorizarlo, así como establecer la visibilidad del cerebro: pública (disponible para todo el mundo) unlisted (público pero oculto en las búsquedas y en el directorio) y privado (sólo visible a la gente que se especifica).
Esta última opción es muy útil, ya que se puede seleccionar a los usuarios que se deseen otorgándoles el rol de lector, así como mandar un mail a la dirección deseada con el enlace del brain para que puedan visualizarlo sin necesidad de crearse una cuenta.
Evidentemente, al publicarlo en la web pierde muchas de las características y del atractivo que tiene al verlo en la pantalla del ordenador, pero, es una herramienta muy útil y sencilla de utilizar.
Así que, por aquí te dejo mi mapa mental
2 comentarios sobre “¿Un mapa qué?”